LA ESCUELA EUROPEA PROMUEVE UN CAMPO DE TRABAJO EN SAN ANTOLÍN DE IBIAS.
Por tres años consecutivos, profesores y alumnos de la Escuela Europea vienen realizando en los primeros días del verano campos de trabajo para restaurar Iglesias de distintos concejos, con el fin de ir recuperando, poco a poco, su patrimonio artístico, cultural y religioso.
Si en 2007 y 2008 dirigieron su actuación en las Iglesias de San Juan de Beleño, Viego, Taranes y Casielles del concejo de Ponga, este año la actividad se centró, del 25 de junio al 2 de julio, en la Iglesia de San Antolín de Ibias, un templo de estilo románico cuya primera estructura data del s. XI y donde el retablo mayor, bastante deteriorado por la humedad y el paso del tiempo, fue restaurado en su totalidad por este grupo de voluntarios de la Escuela Europea.
El párroco de Santa María, Pablo Gato, y los vecinos de San Antolín acogieron desde el primer momento esta iniciativa y pronto mostraron su agradecimiento a dicha labor desinteresada colaborando en mano de obra, colocación de andamios, materiales, etc que ayudaron a agilizar las obras de restauración y limpieza del templo.
Para Charo Gómez Haces, directora de la Escuela Europea, “este tipo de iniciativas se seguirán potenciando entre los alumnos no solo por lo que les ayuda en su formación en valores, sino también por el beneficio de estos núcleos rurales y el enriquecimiento cultural y humano de unos y otros”. Posiblemente el próximo verano la campaña de restauración tenga lugar en la Iglesia de Santa María de Cecos, otro pueblo de la montaña suroccidental asturiana a pocos kilómetros de San Antolín de Ibias.
Por tres años consecutivos, profesores y alumnos de la Escuela Europea vienen realizando en los primeros días del verano campos de trabajo para restaurar Iglesias de distintos concejos, con el fin de ir recuperando, poco a poco, su patrimonio artístico, cultural y religioso.
Si en 2007 y 2008 dirigieron su actuación en las Iglesias de San Juan de Beleño, Viego, Taranes y Casielles del concejo de Ponga, este año la actividad se centró, del 25 de junio al 2 de julio, en la Iglesia de San Antolín de Ibias, un templo de estilo románico cuya primera estructura data del s. XI y donde el retablo mayor, bastante deteriorado por la humedad y el paso del tiempo, fue restaurado en su totalidad por este grupo de voluntarios de la Escuela Europea.
El párroco de Santa María, Pablo Gato, y los vecinos de San Antolín acogieron desde el primer momento esta iniciativa y pronto mostraron su agradecimiento a dicha labor desinteresada colaborando en mano de obra, colocación de andamios, materiales, etc que ayudaron a agilizar las obras de restauración y limpieza del templo.
Para Charo Gómez Haces, directora de la Escuela Europea, “este tipo de iniciativas se seguirán potenciando entre los alumnos no solo por lo que les ayuda en su formación en valores, sino también por el beneficio de estos núcleos rurales y el enriquecimiento cultural y humano de unos y otros”. Posiblemente el próximo verano la campaña de restauración tenga lugar en la Iglesia de Santa María de Cecos, otro pueblo de la montaña suroccidental asturiana a pocos kilómetros de San Antolín de Ibias.
5 comentarios:
A ver si hay suerte y, en una de estas, le toca al turno a la iglesia de San Pedro de Taladriz.
Hace unos años la arreglaron un poco, por dentro, pero ahora sería bueno que restauraran los hermosos retablos que tiene.
A ver si llega uno de esos talleres porque si no tendrá que subvencionar la restauración el Marquesado.
Pues sí, señor, un aplauso bien fuerte. Todo esto lo tendría que hacer la administración, pero con tantas dietas, viajes oficiales, coches oficiales, sueldos de chóferes, comilonas en restaurantes de lujo, pernoctaciones en hoteles de alto nivel, más lo que se llevan cuando echan mano a la caja, no queda un duro en las arcas para tareas como ésta, que tienen que hacer particulares. Cuando el Estado no funciona, son los ciudadanos los que tienen que hacer de Estado.
Excelente labor para los pueblos aunque debería ser la Iglesia quien debiera aportar -también- algo, que medios creo que tiene (aunque ellos siempre se rasguen las vestiduras para hacernos creer lo contrario).
Ayyyy, es que no puedo con el Clero...
La Administración, el Estado o como se quiera llamar tiene que arrimar el hombre, pero quien en realidad tiene que arreglarlo, en caso de que le interese, es el Arzobispado, el clero, que es a quien pertenece todo este arte.
Por ello, si los propios dueños dejan a la deriva sus pertenencias, por qué tiene el Estado, que somos todos poner el dinero para arreglarlo?
Voy a hacer lo mismo con mis propiedades a ver que pasa, tendré que tirar yo por lo mío o vendrá la Administración corriendo a ayudarme?
Tiene razón el Bandido. Me estaba queriendo referir al patrimonio artístico en general, y no me he explicado bien. En Caboalles de Abajo está restaurando un viejo molino un grupo de chavales. Los hórreos de teito también son de particulares, pero muchas veces desaparecen porque el propietario no puede afrontar los gastos de mantenimiento, y ahí sí que es necesario el dinero de nuestros impuestos para echar un cable.
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