BUELTA Y LORENZANA

Las antiguas crónicas relatan que, cuando el visigodo don Rodrigo perdió España, los cristianos se retiraron a Asturias por no ser oprimidos y maltratados por los infieles y decidieron nombrar rey al infante don Pelayo.



Parece ser que poco después, otros fueron a El Bierzo, donde hallaron el río que llaman el Sil, el cual tiene algunas puentes hechas de cal y canto, que dicen ser hechas por Hércules, en donde hallaron resistencia en alguna de ellas para el paso por los cristianos naturales: una de ellas fue en la torre de la villa de Toreno, donde vencieron a numeroros moros, que querían ganarla y poder pasar por aquel valle a las Asturias…

Y un día de madrugada, antes del amanecer, llegaron repentinamente con tanto alarido, que los cristianos desampararon la puente corriendo a la torre; pero uno de los que allí estaban quedó solo con grande ánimo y esfuerzo con un venablo en la mano y dando grandes voces diciendo “vuelta, vuelta”; y de vergüenza volvieron y defendieron la puente y todo aquel paso, por donde los moros no pudieron pasar ni entrar (…)

Sabido por el rey, le dio a este esforzado caballero de Toreno por armas la dicha torre y puente y treinta y tres estrellas de oro en campo azul, y unas como estacas verdes de puntas sangrientas que se defendieron con ellas, y quedóles aquella letra, vuelta, al revés.

Los escudos que vemos se encuentran en la fachada principal de la Casona de los Buelta en Taladrid.

(*) El texto de la leyenda sobre el origen de estos escudos de armas, que también se pueden contemplar en la Iglesia de San Miguel de Laciana, ha sido extraído del libro "Soñadores de libertad" de Víctor del Reguero.