Si hay algo mejor que acudir a un estreno, es estar presente
en el pase previo, entre bastidores. Si hay algo mejor que rondar cien años, es
llegar a tiempo. Y si hay algo mejor que pasar por Quei Funsiquín en Gedrez, es
hacerlo para ver la exposición de Ernesto García del Castillo, más comúnmente
conocido como NETO.
(*) De la colección de Aguinaldeiros de Xedré
Antes de seguir con este post, he de confesar que yo soy
NETOfila, NETOmana, NETOfan y NETOmaníaca si me apuras, así que cuando ayer me
enteré de que HOY VIERNES inauguraba una exposición en Quei Funsiquín, como me
encontraba por la zona, me acerqué a ver si la muestra estaba montada y podía
sobornar a Azu para que me dejara verla. El soborno no fue necesario. La
exposición no estaba montada. Pero ÉL estaba allí, así que no sólo tuve la
ocasión de conocerlo en persona, sino que incluso pude colaborar en el
desembalaje de los cuadros y charlar largo y tendido con él sobre su obra
gráfica.
(*) Neto mostrándole a Azu una acuarela de Xedré
Neto tiene un don para el dibujo; un don que parece ser
innato pues él ya se recuerda dibujando desde su más tierna infancia. Lo
sorprendente del caso es que su vocación más temprana fuera la de triunfar como…
¡torero! Parece ser que la idea no cuajó, pues tras practicar algunos pases con
un carnero en Oubacho, se decidió por acabar el bachillerato e ir a Madrid a
estudiar…¡economía! Tras un par de años dedicado a la contabilidad, Neto seguía
albergando la ilusión de dedicarse a la ilustración. Tenía en mente convertirse
en un dibujante de cómics, pero sus tentativas con distintas editoriales de la
capital no acababan de cuajar, así que, probó suerte con el humor gráfico y, ni
corto ni perezoso se dirigió a La Codorniz donde le aceptaron un par de viñetas
con las que se dio a conocer en la revista reina del humor satírico de la época.
(*) El artista seleccionando los cuadros para el montaje.
Esta colaboración le abrió las puertas en su Asturias natal,
donde La Nueva España le ofreció la posibilidad de ilustrar su tira diaria de
humor. Luego fue La Hoja del Lunes y, por último La Voz de Asturias donde tras
¡26 años de servicio! se vio de pronto en la calle cuando el periódico cerró
sus puertas en abril del año pasado. Pero como suele pasar con la gente que
realmente vale, cuando se les cierra una puerta, se les abren mil ventanas, y
Neto decició volcarse en otras actividades que tenía un tanto abandonadas, como
la ilustración de libros y la pintura, de la que esta muestra es sólo un botón…
(*) De la colección de Aguinaldeiros de Xedré
Se trata de acuarelas perfiladas con tinta china con temas
costumbristas, asturianos en general y de Cangas en particular, pero tratadas
de una forma original e innovadora, con influencias cubistas y –si se me
permite la licencia- “mingotianas”. Mucha de su obra es en blanco y negro, pero
en esta exposición se incluyen también algunas obras con toques atrevidos de
color –como sus trasgos- y otras con tonalidades más sosegadas, pero que añaden
un plus a su ya de por sí atractivo trabajo.
(*) De la colección del Trasgo
(*) Dos vistas de la villa de Cangas.
(*) De la colección Aguinaldeiros de Xedré.
Añadir, después de este sermón, que lo fundamental en el caso
de Neto, no es que sea un artistazo. Lo verdaderamente importante de ESTE ERNESTO es
que sigue siendo un cangués humilde, sencillo y encantador. Y que encontrarse con gente así de vez en cuando te reconcilia con la humanidad...
3 comentarios:
La viñeta diaria de Neto en La Voz de Asturias era siempre una gota de alegría en un río de crónicas convulsas. La sorna, guasa, ironía o perspicacia para dibujarnos la noticia y para descubrirnos que no todo era como decían nuestros políticos, empresarios o deportistas aportaban siempre un valor añadido a cualquier medio.
Me alegro que LNE cuente con su colaboración semanal para mostrarnos el lado "divertido" de la capital del Principado.
Y, por supuesto, mi enhorabuena al Funsiquín por esta exposición y otros actos culturales que llevan a cabo y a Neto por sus cuadros que a buen seguro serán todo un éxito.
Sabrás que precisamente ayer salía en el díario La Nueva España, en La Vida Buena, Casa Funsiquín. Buen sitio. Lo conocimos hace una temporada. Por cierto, ayer anduvimos por la cumbre del Entrecoladas. Pena de día. Volveremos.
Un saludo
Pienso lo mismo que tu, Neto es una de esas personas buenas que siempre quieres tener cerca.
Publicar un comentario